martes, 16 de junio de 2009
Apuntes sobre el plagio (IV)
Plagios
Hace mil millones de años en este mundo entonces flamante, un organismo primitivísimo, empezó a alargarse y a especializar diversas funciones que fueron el primer proyecto de aparato digestivo que hubo en la Naturaleza. La inauguró el gusano. Ese trabajo coordinado, de instrumentos puestos en serie – los dientes, las glándulas salivares, gástricas, duodenales, hepáticas, pancreáticas, – fue el primer trabajo en cadena. Quiere decir que no le corresponden la invención del trabajo en cadena a Henry Ford, sino a un gusano que vivió hace mil millones de años. ¡Es un plagio vivo! Uno ha conversado en cierta oportunidad, largamente con Gregorio Marañon. Y le oyó exponer, a lo largo de una conversación encantadora – de sabio y poeta- sus estudios sobre el porcentaje que hay e mujer en el hombre y el porcentaje que hay, de hombre, en la mujer. Pero, mientras el sabio hablaba, uno – claro está que sin ser nadie como mas de cuatro- pensaba que todo eso que él estaba diciendo, ya lo había dicho Vaininger, y que Vaininger lo había sacado de Schopenhaüer y que a Schopenhaüer la había llegado…, “resonando en Platón”. Uno piensa, de pronto en Garcilso. ¿Se acuerdan? EL gran Garcilaso…”De aqueste vivo fuego en que me apure y consumirme poco a poco espero…” ¡Le copió a Dios y a todo el mundo! A Virgilio, a Horacio, a Ausias March, a Petrarca, a Sannazar, al Tasso, a Bembo. ¡Garcilaso de la Vega!
¿Y quien puede negar que Milton no se inspiro un poco demasiado para su “Paraíso perdido” en el “Lucifer” del holandés Vondel? ¿ Y quien puede negar el parecido impresionante entre el Frayle Timoteo de “La Mandrágora” de Maquiavelo y el Tartufo de Moliére? Claro que muchos se confesaban. Publio Virgilio Marón le copiaba los versos a Ennio y decía que sacaba perlas de un lodazal, porque le copiaba los mejores. Pero con las perlas se quedaba él. Por su parte Moliére manifestó aquello, famoso: “Je prendre mon bien au je le trouve”. Yo tomo lo bueno donde lo encuentro. ¿Y Shakespeare? Shakespeare sacó su Hamlet de Amboldi de la leyenda escandinava, tratada antes por Saxo Gramático y por el francés Belleforets. Sacó su “Mercader de Venecia” de la Hitopadesa, una colección de cuentos hindúes. Sacó “La tempestad” de “La comedia de la bella Sidea” del alemán Jacobo Ayrer. Sacó Otelo del siciliano Giraldi Cinthio. Y con Romeo y Julieta ya el plagio se transformaba en pavoroso. En efecto: el primero en escribir la historia del trágico romance fue Masuccio, en Masuccio se inspiró Luigi da Porto, en Luigi da Porto se inspiro Mateo Bandello, y de Mateo Bandello sacó Shakespeare su drama. Pero muchisimos años antess de que se amaran en Verona el Montesco con la Capuletita, Bavhabuti, un poeta hindu, compuso una comedia titulada “Malatimadhava” inspirada en el hecho real de Malava y Malati, dos amantes a los que les pasaron las mismas cosas que a Julieta y Romeo. ¿Quiere decir que no solo Luigi da Porto, no solo Mateo Bandello, no solo Shakespeare copiaron? ¡Copiaron Romeo y Julieta también! Y ahora lo del Huevo de Colón. El que invento el asunto de que el huevo lo paró Colón, fue un tal Girolamo Benzoni, que en año 1565 publicó un libro titulado “Historia del mundo nuevo” en el que dice: - “Signor Cristófano Colombo dando una battuta su la távola, Fermo l`uovo striciando un poco de la punta” Golpeo el huevo en la mesa el almirante, le rompió un poco la punta y lo paro. Se dice que eso ocurrió en el banquete que le dio a Colón el Cardenal Mendoza. Extrañaba un poco que en la mesa de un señor de esa alcurnia, y teniendo en cuenta los usos de la época en cuanto a comidas, hubiese huevos con cáscaras.
¿No es cierto? Y extrañaba, aun, que Cristófano Colombo pidiera que le trajeran un huevo para hacer el experimento. Ahora se sabe que el que paró el huevo no fue Colón. Fue Filippo Brunelleschi. Hay en Florencia una Iglesia cuya construcción duró 400 años Santa María del Fiore. Y la cúpula de esa iglesia maravillosa de veras, fue construida por el citado artista florentino: Filippo Brunelleschi. Las dificultades que se oponían a la obra que se propusiera Filippo, habían determinado el pesimismo de sus colegas. Opinaban que aquello no podía llevarse a cabo. Se ingenió, empero, el artista y realizo, con toda fortuna su trabajo. Entonces los otros dijeron que “así” como el lo había realizado –Empleando medios que a los otros no se les había ocurrido- lo realizaba cualquiera. Entonces fue cuando Brulleschi, mando a pedir un huevo, lo rompió y lo paró: - También es fácil parar un huevo… cuando se sabe como.- Pero muchos eruditos, entre ellos Vasari, que tanto estudio a los artistas italianos, sostiene, en un capitulo de 20 paginas, que Brunelleschi paro el huevo en la parte mas ancha. Así se escribe la historia. Las frases de Voltaire. El 24 de setiembre de 1766, en efecto, Voltaire le escribía a Madame Du Deffand diciendole: - “así se escribe la historia. Y vaya usted a hacerles caso luego a los hombres famosos.”- Pero una vez que Madamme Du Chatelete, paseando por el parque de Cirey, le pidió a Voltaire que le improvisara, allí mismo, unos versos sobre el cielo estrellado que los cubría… ¡Voltaire le “improvisó” unos versos que eran de Ronsard!
¡Cómo no van a ser iguales todos los boleros!
Wimpi (Ventana a la calle)
Vease ademas:
Un fantasma recorre el arte
Apuntes sobre el plagio(II)
Apuntes sobre el plagio (III)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Y así como el plagio retoma para aggiornar a los tiempos que corren, este blog aún parece respirar destruyendo toda conexión con su pasado.
ResponderEliminar¿Que fue primero, Anakin o el ponja con el palo?
Como dijo Jorge Bucay, Hay que plagiar pero sin perder la ternura jamás.
Una teoria un tanto persecutoria.
ResponderEliminarbasada en la propiedad del conocimento.
talves me ubiese resultado divertido si conociera a alguno por lo menos uno de todos esos autores. Pero otra vez me quede afuera.
Conoci a dos un gusano y un huevo y me inspiraron muchas cosas.
¿O se las plagie?
Bien bibliotecólogo lo tuyo.bien wimpi!
ResponderEliminarYo vivía en Garcilaso delaverga!
Me dan ganas de plagiarte esto que escribistes. Pero no lo voy a hacer porque todo es mentira. Lo del huevo, lo de Voltaire, pura fruta.
ResponderEliminarNada paso, estoy seguro.
El problema es que todos los números contienen al 1. Menos, claro está, el n-1.
Enhorabuena por el emprendimiento gurisito.
hubiese del verbo haber con HHHHHHHHHHHHHHHHHH
ResponderEliminarSeñoooooooooressss... qué culpa tiene Wimpi de que ya nadie lea nada? qué culpa de que nos enteremos de ls plagios porque nosotros mismos somos un plagio de lo peor de su obra? Para decir que es mentira habría que leer no? Bue no le pedimos más peras a los olmos... nunca las dió.
ResponderEliminar