miércoles, 27 de julio de 2011

Catatonia


Desde lejos la veo irse. Irse a la mierda para siempre. Y es que, cuando digo que es para siempre, no estoy diciendo que lo sea. A saberlo. Se fue en las callecitas de cairoli y mazzini, se fue en todas las calles, pero principalmente en estas. Me corri una cuadra, o dos. No tanto por un porro, no tanto por nada. Un final indie, como inculcamos en estas páginas. No tan noise, no tan shoegaze. Aunque siempre miramos al piso, y abrazamos con los ojos abiertos. A nadie se le ocurre llorar en las despedidas. Luego viene lo otro, golpear puertas. Nicolas! Nicolas! Soy tu vecino, el que vivia enfrente que ahora ya no vive. Yo me acuerdo mas de tu hermana y de tus amigas, me dice. De vos no tanto. Recién terminé el mate. No quiero, tengo whisky. Siempre con tu tabaco, eh!. Siempre. Cuando digo siempre no quiere decir que lo sea, a veces no tengo. El barrio esta menos divertido desde que te fuiste. Me voy. Camino cuadras, las he caminado todas. Ver TN en lo de Piero. No me aguanto la mente. Quien pudiera tener un mp3 y tener the organ dentro. Apenas me quedan minutos. Y alguien me invita a algo. Después el 546. Quiero fiebre y no tengo. No puedo vomitar. No puedo. Escucho la tertulia, que la repiten de noche y hay un experto en politica argentina, hablando pavadas, no tan pavas. Ganó el socialismo en Santa Fé, pa la Cristina que lo mira por Tv, abierta, pública y con fútbol. ¿Cuando empieza el próximo campeonato? Hay que endurecerse, sin perder la ternura. Los amigos me lo repiten. Habrá que hacerles caso. O acostarse temprano.

2 comentarios:

  1. hay ke akostarse temprano siempre!
    y de vez en kuando endurecerse sin perder la ternura, ta.

    iñaki

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